Rustha Luna: Una Mujer de Mundo

7 juillet 2009

une vue de l'installation de Rustha Luna, Sous La Tente Bordeaux juin 2008 (dr 2008)

Rustha Luna: Una mujer de mundo

Deambulando por internet, recorriendo las paginas del site de Rustha Luna, me impresionó inmediatamente el fuerte temperamento de las obras que se mostraban. Sentí aquella prescencia que me hechiza siempre al descubrir un nuevo trabajo. Esas ondas positivas que nos hacen ascentir con la cabeza, la omnipresecencia de la idea de las ideas. Me sentí ligeramente impregnado por esas imagenes y mi primera impresión de aquel día se metamorfoseo en una necesidad de ir más lejos. La concepción que uno se hace de una obra, puede ser falsa o simplemente ingenua, sin embargo, ésta parece estar vehiculada por el motor de un pensamiento que creo es principalmente no una mezcla de ideas de donde habría emergido una serie de conceptos artísticos, sino el uso judicioso de une medio « claro ». La mujer queda posicionada como punto de referencia, como la punta de un compas que otorga al espacio circundante un perimetro donde se pueden atribuir las posibles interpretaciones, sin que esto suponga alejarnos verdaderamente de la significación que el artista querria darle: Siempre con la condicion-no obstante- de encontrarnos bajo el magnetismo de la figura y estar en condiciones de descifrar de manera suscinta, caer en cuenta, ante la evidencia, que hay que poner un poco de uno mismo para llegar al fondo de un trabajo exigente. No contentarse. No creer que lo que uno esta viendo es realmente lo que ve.

En el espacio de ese movimiento, toda una gama de proposiciones, no radicales pero al libre albedrío, que oscilan entre la provocación y el humor, cargada de poesia, y van conduciendo al placer estético, éste mismo librado ya de la molestia y de la vaguedad artistica emergen todas como pistas codiciables. Sin declararle la guerra al punto de vista, Rustha Luna se esmera en enderezarlo y devolverle sus cartas de nobleza. Se toma muy en serio el hecho de provocar una reacción poética subversiva e incitar de esta manera a través de lo que podemos calificar desde una posición ambigüa, la aprehensión del fenómeno Como una mujer actual puede hacerse la interprete de las mujeres del mundo ? Y todo esto, permaneciendo siempre lo mas cerca posible de su identidad, manteniendose siempre muy risueña en cuanto a los medios utilizados para que la imágen sea mas ligera. Inmersos en un sentimiento de exilio, éste mismo en osmosis con el arte (con una « a » como aire puro) Es posible hoy de extraer materia a la novedad ? Dejando de lado el aspecto folclorico en favor de la elección de una posición política, y reduciendo las revindicaciones de las mujeres al nivel de simple militantismo, nuestra sociedad ya ha echado los dados. Rustha Luna toma el relevo a su manera y crea un vinculo pasando mas por el cuestionamiento que por la evidencia del juego de palabras, juego de rol, y juego de pistas.

Estrellas de que ? Mujeres de donde ? Efigies para cuando ? A veces es útil que las imagenes manufacturadas por los artistas esten alli para defender el punto de vista menos evidente.Toallas higiénicas con las banderas del mundo bordadas a la mano por el artista, todo en forma de cubrecama: Aquello no ha sido creado con la intención de hacer una política « del dia a dia » la mujeres estan reglamentadas por todo el mundo -nos dice ella- con un tono claro, con una sonrisa que viene a corroborar esta teoría de la naturaleza…a partir de esto., la bandera no es forzosamente el emblema de un pais...hay que comprender que sucede lo mismo en todas partes. Un suceso sangriento puede estar escondiendo otro. Al descubrir esto uno descubre otra cosa. La estética de la intención y la utilización de tecnologías apropiadas confieren al trabajo una flexibilidad que es como la ultima etápa de un complejo proceso de fabricación. De esta manera, los trajes con los cuales ella se va a ataviar son preparados hasta el mas minimo detalle en la alcoba de un mini-taller y a través de varios campos de investigación, el artista dirige lentamente el tema, cuida con extremada atención -como uno cuidaria sus uñas- como dicen que hacia Visconti , quién no dudaba en disponer los cubiertos antigüos en los cajones antes filmar, para poder dar la maxima energía a la obra. La artista se preocupa también del revés del decorado. Ocurre mucho al nivel de las tres dimensiones, pero solamente la imagen plana sera la portavoz de aquella magnifica labor de preparación que se esconde bajo la inmensa masa del iceberg. Nos referimos a los trajes, como ese kimono cosido a la mano con lonchas de algodones desmaquillantes o aquellos accesorios: nunchaku cubiertos de perlas y el machete con la hoja engastada de diamantes. Y asi pasamos a las herramientas. Aquellas herramientas utilizadas antaño en Perú, en un periodo donde aprendió el oficio de escultura. Herramientas de carpintería y de ebanistería propias a una escultora en madera, transformadas en herramientas al servico de lo virtual, por razones relacionadas al principio con la cultura francesa. Rustha Luna va a conservar este arte y transferirlo a otro planeta.

En la maraña de las posibilidades de su obra, me ví frente a un ovillo. Tiré de uno de los hilos (parece que así se debe hacer para que uno recuerde sus sueños en la mañana) para que poco a poco se pueda organizar en la escena, sobre una pista, guardando como meta principal el hecho de hablar del otro, lo que contribuye a inflar la paradoja. Y sin embargo no se puede imaginar de otra manera. Exigir de uno mismo y trastocar la imagen que uno tiene de su propio cuerpo para hablar de lo que se esconde en la cabeza. Esto viene bastante bien, un hilo sobresale...jalé y aparecieron signos apenas separados entre ellos pero que claramente constituyen el lienzo de la perra o la mujer en tránsito desde su desfragmentacion al exilio. El trabajo puede ser autobiográfico, pero también a veces cambiante y variante. Es posible que nuestra visión no sea conforme a la vision del artista y aun menos con la de los otros espectadores de la obra. Aquél hilo evoca para mi una cierta resistencia, el propio a los materiales utilizados en las numerosas piezas, del cual sería la ilustración emblemática. El hilo terminó en un montoncito rojo en medio de una fotografia de ella, niña, avanzando hacia los brazos de su padre. El hilo del ovillo que se desata, el hilo que se sigue, el hilo que se deja recorrer, aquel que teje o dibuja de un punto a otro el episodico camino entre los mares. Otra vez alguien a quién yo no conocía, en resistencia pero no en rebelión, capitaneando un trabajo al mismo tiempo sutíl y poderoso. Inmunizado contra los clichés. Algo que merece ser tomado en consideracion sea uno hombre-mujer o mujer-hombre, mujer-mujer o hombre-hombre, como las cosas bellas y universales que cuestionan el sentido de la vida y el lugar donde nos atrevemos a poner los pies....en la Tierra de los hombres...y de las mujeres. Rustha Luna. Mujer de Mundo.